Tecnologías de recarga hídrica y cosecha de agua en el territorio
Estas tecnologías están orientadas a proveer agua a la finca, captándola de diversas fuentes: sistemas colectivos de canal; de caudales que escurren temporalmente por determinadas quebradas; de sistemas de almacenamiento y distribución que captan agua en la misma finca, desde el terreno, o desde los techos de las viviendas.

El objetivo es el uso y aprovechamiento de estas aguas en períodos de pocos meses y garantizar el aprovisionamiento de agua en las viviendas rurales para su uso poblacional o agroproductivo.

Las tecnologías Tipo 2 son complementadas con sistemas de captación, aducción (canal que lleva agua de la captación hacia los reservorios), válvulas de regulación, sistemas de conducción y finalmente de riego. Por tanto, en la agricultura, el éxito de las mismas no habría sido posible sin la instalación de los sistemas de riego, sobre todo presurizados.

En otros casos, estos sistemas ponen énfasis en asegurar el agua poblacional, sobre todo en zonas donde el abastecimiento de agua potable es un problema para las comunidades, y solo complementariamente, el fluido se utiliza para el riego de pequeñas fincas que permiten la producción, principalmente para el autoconsumo.

Por lo general, las tecnologías de este grupo son manejadas por las familias, en consecuencia el mantenimiento de muchos de sus componentes depende de la mano de obra familiar. Siendo tecnologías “individualizadas”, la sostenibilidad depende de cada uno y eso genera mayor compromiso para su cuidado; sin embargo, no se descarta el trabajo colectivo de algún tipo de organización, más aún si estos sistemas son conectados  a fuentes naturales o artificiales “públicas” de agua.